Inaugurado en 1998, este local de gustoso interiorismo vintage, tuvo un precedente dirigido también por el mismo propietario, Francisco Reyes, el conocido Rastro de la década de los ochenta y noventa del pasado siglo. Como aquel, este guarda el sabor de viejo anticuario y comunica al ambiente la pátina del tiempo y de él recupera una atmósfera alejada de neones e impone con contundencia una personalidad de old fashion atemporal como lo es el gusto por lo clásico. Un must mediterráneo de obligada visita y que no debe perderse de vista por lo que comunica de estilo a la imagen especial de Almuñécar.
Vidrieras, viejos relojes, antiguas fotografías, bodegones o paisajes combinan con el gusto por la coctelería o la música de los años 60 de los ídolos italianos en mezcla con los Croonner de los cincuenta o el jazz de Miles Davis o Stan Getz.
Su galería de arte, en su primera planta comunicada por una claraboya de cristal al espacio inferior, realiza exposiciones bimensuales en pequeño formato.
En su segunda planta, encontramos una espléndida terraza con barra y celosías que adorna con plantas exóticas, los muros del antiguo Convento de Mínimos del que es paredaño.
Es el sitio ideal para tomar copas, cocktails, cervezas especiales, licores, etc., con muy buen ambiente y trato exquisito. Y por supuesto música inmejorable. El primer y tercer miércoles de cada mes, no te puedes perder los conciertos en directo.
Y a partir del 9 de junio, empezamos los intercambios de idiomas, una experiencia nueva y distinta.
Contacto para reservas:
ricardohagedorn@hotmail.com
Horario entre semana:
21:00 – 2:00
Horario fin de semana:
21:00 – 3:00